Cuatro autores inclasificables que devuelven su sentido al vocablo amateur. Filman como respiran, ajenos a los dictámenes de la cara acuñada del arte: la industria. No pertenecen ni a la corriente cinematográfica de la posguerra, pero tampoco al de una nouvelle vague ya integrada y reabsorbida por el sistema. Estos autores son analizados sólo como suma de individualidades. Su genuinidad impide que puedan agruparse o clasificarse como generación. Por eso, la propuesta de este libro sobrepasa la materia del cine y se acoge a una absoluta multidisciplinariedad. Constituyen una disidencia para con la industria cinematográfica que sólo puede comprenderse en el contexto social y filosófico del siglo XX.