En el campo educativo se ofrecen muchos proyectos, con diferentes objetivos, criterios y métodos de actuación. Los educadores tienen serias dudas, y cosechan no pocos sinsabores, ante muchos de los resultados obtenidos. Se debaten entre los métodos autoritarios o permisivos; buscan ayuda en modelos y personas capaces de compaginar lo válido de lo nuevo y lo antiguo, para que el hecho educativo no se convierta ni en algo anquilosado, ni en algo aventurado y sin sentido. En este contexto, el redescubrimiento del Sistema Educativo de san Juan Bosco, puede convertirse en un referente para madurar puntos de convergencia y líneas de acción que desemboquen en proyectos educativos capaces de responder a las demandas de educadores y educandos. Conocer bien este sistema de educación puede abrir un horizonte lleno de esperanza a quien toma contacto por primera vez con la experiencia educativa y poner nuevas metas ilusionadas a quien ya lleva años en la tarea. El Sistema Educativo de Don Bosco es considerado por muchos como un estilo pedagógico clásico y moderno, antiguo y nuevo, genuinamente humano y optimista, por el simple hecho de inspirarse en todo lo que es bueno, verdadero y bello, principalmente en los criterios de amor.